Melanoma Cáncer de piel Investigación
En el presente artículo les brindaremos un resumen del estudio “ Bioelectric Applications for Treatment of Melanoma”, de Stephen J. Beebe, Karl H. Schoenbach y Richard Heller (2010)
Ya desde la década de los 50´s se ha empezado a estudiar en diferentes campos de estudios, las aplicaciones de PEMF (Pulsed electromagnetic field, por sus siglas en inglés) o (Campos electromagnéticos pulsantes en español), podemos evidenciar que en las últimas décadas ha habido una creciente preocupación por el cáncer y otras enfermedades a nivel mundial, es por esto, que desde hace 30 años las investigaciones se han centrado en el uso de esta tecnología en diferentes tipos de enfermedades.
El estudio de Beebe y compañía, se centra en las aplicaciones de la bioelectricidad para el tratamiento del melanoma, un tipo agresivo de cáncer de piel, el melanoma se caracteriza por el crecimiento anormal de células pigmentadas llamadas melanocitos, mientras que la bioelectricidad se refiere al estudio de los campos eléctricos y sus efectos en los sistemas biológicos, tales cómo nuestro cuerpo humano.
El tratamiento tradicional del melanoma incluye la cirugía, la quimioterapia y la radioterapia. Sin embargo, estos enfoques tienen grandes limitaciones en términos de eficacia y grandes efectos secundarios, es por esto que en el estudio se examina el uso de la bioelectricidad, específicamente la electroporación, en el tratamiento del melanoma. La electroporación es un proceso mediante el cual se aplican pulsos eléctricos breves y de alta intensidad a las células cancerosas, lo que provoca la formación de poros en la membrana celular. Esto permite que las drogas o agentes terapéuticos, tales cómo la quimioterapia entren más fácilmente en las células cancerosas, lo que aumenta la efectividad de la terapia.
Además de la electroporación, el artículo también discute otras aplicaciones de la bioelectricidad en el tratamiento del melanoma, como la ablación por radiofrecuencia y la electroquimioterapia. La ablación por radiofrecuencia utiliza corriente eléctrica de alta frecuencia para calentar y destruir las células cancerosas. La electroquimioterapia combina la administración de agentes quimioterapéuticos con pulsos eléctricos para aumentar la absorción de las drogas por parte de las células cancerosas.
Los autores destacan que las aplicaciones de la bioelectricidad en el tratamiento del melanoma muestran un potencial prometedor, especialmente en casos donde las terapias convencionales pueden ser limitadas. Sin embargo, también señalan la necesidad de investigaciones adicionales para comprender completamente los mecanismos involucrados y determinar la seguridad y eficacia de estas técnicas en diferentes etapas y tipos de melanoma.
En resumen, el artículo aborda el uso de la bioelectricidad, incluyendo la electroporación, la ablación por radiofrecuencia y la electroquimioterapia, como enfoques novedosos en el tratamiento del melanoma. Estas técnicas tienen el potencial de mejorar la efectividad de la terapia y reducir los efectos secundarios en comparación con las terapias convencionales.
Entre las ventajas que la terapia PEMF nos brinda, los autores incluyen:
1- Múltiples mecanismos de muerte celular programada, incluyendo estimulación de la apoptosis de las células cancerosas y la inhibición de la angiogénesis, dos características bien conocidas del cáncer, esta última necesaria para una tercera característica probable del cáncer, la invasión y metástasis.
2- Inducción rápida de la muerte celular en células cancerosas con exposiciones mínimas al tratamiento, lo que reduce las posibilidades de resistencias y recurrencias.
3- Muerte celular programada no mediada por mitocondrias, lo que puede eludir muchas mutaciones que causan el melanoma y otros tipos de cáncer.
4- Tratamiento efectivo de todas las células dentro de los campos eléctricos, incluyendo células tumorales de crecimiento rápido, células huésped de crecimiento más lento y células madre cancerosas.
5- Efectos secundarios locales y sistémicos mínimos.
Finalmente entendiendo que desde este estudio realizado el 2010 por Beebe, S.J., Schoenbach, K.H. y Heller, R ; A la fecha, se han realizado grandes avances en los estudios de PEMF y cáncer, comprendiendo y utilizando no solo éste sino una serie de avances en la tecnología, la que actualmente es segura, no invasiva y no tóxica.
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